9 nov 2010

Australia 3. Melbourne

MELBOURNE

Ya estamos en Melbourne después de una salida un tanto accidentada. Por un lado algunos problemas personales de última hora y por otro la visita del papa a Barcelona han hecho que nuestra salida de vacaciones estuviera pendiente de un hilo, pero después de hacer algunos cambios aquí estamos. Salimos hacia Barcelona el sábado con la intención de pasar allí la noche y el domingo dirigirnos a el aeropuerto pues nuestro avión salía destino Qatar a las 15.30. Pero como al Santo Padre se le ocurrió ir ese mismo sábado a Barcelona, optamos por ir con el coche de alquiler directamente al aeropuerto y de allí mochilas en ristre a Barcelona pues no habría dios cristiano que se pudiera mover en coche por el centro de la ciudad.

La primera sorpresa nos la llevamos en el aeropuerto cuando al facturar las maletas la azafata me dice que tienen que comprobar que mi visa ha sido aceptada. Yo con exquisita educación le comunico que ya he solicitado la visa para los dos y le enseño los papeles que me habían mandado desde la embajada. Cual sería nuestra sorpresa cuando me comenta que los papeles que yo tenía “no eran la visa” sino que eran “la solicitud de visa” es decir que yo había solicitado la visa pero era ahora mismo, en ese momento, cuando desde el aeropuerto se ponían en contacto con ellos para saber si nos la habían concedido. Por mi cabeza empezaron a pasar todas aquellas circunstancias por las que me podían denegar la visa australiana: delitos penales: no, SIDA: no, tuberculosis: no, haber pegado alguna vez algún canguro: no que me acuerde, haber pensado que la última película de Nicole KidmanAustalia” en un bodrio infumable: si……………..dios, no me iban a dar el visado¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ Menos mal que la azafata actuaba más rápida que yo y antes de que pensara en que podía haber hecho Iñigo para denegarle el visado nos comunico que nos lo habían concedido. También nos digo que en varios casos se deniega, así que imagínate la cara del susodicho con las maletas hechas y planes para un mes cuando le comunican en el aeropuerto que no están admitidos y deben volver a su casita.

El domingo bien dormidos y bien desayunados cogimos el avión, como he dicho antes, a las 15.30 y a las 23.55 (incluido cambio horario) ya estábamos en Doha. Tan solo teníamos 50 minutos para coger el siguiente avión, pero como el aeropuerto es pequeño y ya nos lo conocíamos nos sobraron 40 minutos y eso que hicimos una visita al servicio.

De Doha salimos a las 00.45 y llegamos a Melbourne a las 22.20 un total de 21 horas todo el viaje. Teniendo en cuenta que nos lo pasamos viendo películas y durmiendo se nos hizo bastante corto.


Y POR FIN LLEGAMOS



Lo malo es que cuando llegamos al hostal no teníamos sueño así que a las 12 de la noche nos fuimos a dar una vuelta a ver si había algo abierto, pero a las 2 desistimos y nos fuimos a “intentar” dormir.

Y el martes ya estamos con las pilas puestas, dispuestos a conocer la ciudad que la impresión que nos ha dado es que es de mucho he callejear, de dejarse llevar.

Os adjunto unas fotos de un callejón que me ha llamado la atención. Le llaman "el callejón del arte" y con mayor o menor fortuna distintos artistas o aficionados de la ciudad han ido plasmando sus ideas en las paredes y ventanas




Nuestro primer desayuno en Melboune



Continuara.......

2 comentarios:

  1. Lo de los huevos fritos no sería a las ocho de la mañana...¿no?... vaya estomago...

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  2. Anónimo11/12/2010

    Anda que menuda odisea eh!!! Igual entre una cosa y otra os habeis hecho más creyentes no? jejeje Pasadlo bien ... tu no te meterías un desayuno tan ligero no?

    Cuidaros.


    Javi

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